*Norma Sánchez, la presidenta. El ejido se organiza ante el proyecto del tren México-Querétaro.
Por MARLENE GODÍNEZ PINEDA
El Ejido de Tula tuvo una asamblea informativa este martes 29 de julio en instalaciones del núcleo, donde se dieron cita alrededor de 90 ejidatarios para hablar sobre el proyecto del tren México-Querétaro, con el cual algunas de las tierras comunes y otras parcelas individuales resultarán afectadas por el trazo de la línea férrea.
La recién elegida presidenta del comisariado ejidal, Norma Sánchez Martínez, presidió la reunión con apoyo de la asesora en cuanto a aspectos legales, para hablar previo a la asamblea que tendrán el próximo domingo 3 de agosto.
Ante el avance del proyecto del tren México–Querétaro, ejidatarios hablaron sobre la estrategia colectiva para negociar el precio por metro cuadrado de las tierras que serán afectadas por la obra. Los comuneros han advertido que no aceptarán propuestas individuales y que la unidad será clave para exigir un pago justo.
Durante la reunión previa, se comentó que ya hay ofertas en otros núcleos que oscilan entre 270 y 400 pesos por metro cuadrado, dependiendo de la zona y del reconocimiento como núcleo indígena, condición que, según dijeron, puede elevar el monto. “En otros lugares han logrado hasta 500 pesos, pero eso solo se consigue si están organizados”, señalaron.
Los asistentes llamaron a no dejarse presionar por la urgencia del gobierno federal o de intermediarios, recordando que se trata de una obra pública federal. Además del tema del tren, los ejidatarios abordaron diversas irregularidades acumuladas en los últimos años, principalmente relacionadas con los trámites de dominio pleno, la dispersión de recursos por ocupación previa, y la manipulación de padrones y actas.
Se expuso que muchas solicitudes de dominio pleno han sido detenidas por errores en el padrón ejidal, como la presencia de personas fallecidas, nombres que ya no tienen derechos o individuos que nunca fueron parte del núcleo agrario. En contraste, comuneros legítimos no aparecen registrados, lo que ha generado descontento.
Los ejidatarios insistieron en que no se puede avanzar con los trámites de dominio pleno sin antes depurar y actualizar el padrón, y que para hacerlo se necesita una asamblea legal con el 75% del quórum. Recordaron que actualmente, cualquier procedimiento formal requiere dictamen previo y autorización de la Procuraduría Agraria, lo cual representa un cambio respecto a procesos anteriores más flexibles.
Por otra parte, se señalaron actos de corrupción ocurridos en años pasados, en los que exrepresentantes ejidales simularon asambleas, falsificaron documentos y habrían pagado a personal del Registro Agrario Nacional (RAN) para legitimar inscripciones ilegales. Se indicó que únicamente una resolución judicial podría corregir los asientos registrales alterados.
“Ya no se puede seguir como antes. Todo tiene que ser transparente y legal. Si se va a hacer dominio pleno o negociación por el tren, que sea con papeles en regla y con respaldo colectivo”, enfatizaron los participantes.
Con la mirada puesta en la reunión del domingo, los ejidatarios insistieron en la importancia de la unidad, la asistencia puntual y la elaboración de propuestas claras, tanto para defender su tierra como para exigir un pago justo y legal por las afectaciones del proyecto ferroviario.
“Lo importante es que cuando uno hable, los demás lo respalden. Si vamos cada quien por su lado, nos van a dividir. Si vamos juntos, podemos lograr un mejor precio y mejores condiciones”, concluyeron. *NI*
